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Condecoraciones británicas: Quién fue Joseph King

15 Lunes Abr 2013

Posted by Joan in Condecoraciones europeas

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Arabi Pasha, Cornwall, Egipto, General Charles Gordon, Jartum, Joseph King, Mahdi, reina victoria, Temperance Societies

Hoy presentamos la medalla de Egipto de Joseph King, soldado del 2º Batallón del Regimiento de Infantería Ligera Duque de Cornualles.

Anverso de la Egypt Medal. Con el pasador "The Nile 1885-86". La medalla de Joseph King.

Anverso de la Egypt Medal. Con el pasador “The Nile 1885-86”. La medalla de Joseph King.

Joseph King nació en la parroquia de San Jorge, en Londres el 5 de noviembre de 1854. El examen médico demostró que estaba bien de salud, que medía 1,75m., de complexión correcta, pelo castaño y ojos azules. Para la fase de instrucción fue enviado a la 32ª Regimiento de Infantería, el 5 de julio de 1878. El 4 de octubre de aquel año, fue trasferido al 46º Regimiento de Infantería, con el que sería destinado a las Bermudas hasta el 15 de febrero de 1880 (un año y 135 días). Y allí empezarían sus problemas, ya que pasó 20 días arrestado por haber estado borracho durante el servicio. De las Bermudas, pasa a Gibraltar, donde se estará hasta el 13 de julio de 1882, en el peñón volverá a hacer de las suyas y una vez más es arrestado por estar bebido durante el servicio, por lo que pasará 25 días a la sombra. Mediante la Reforma de Cadwell, el 7 de julio de 1881 se oficializa la unión del 46º Regimiento junto con el 32º Regimiento, lo que da lugar a la creación del nuevo Regimiento Duke of Cornwall Light Infantry (Regimiento de Infantería Ligera Duque de Cornualles), formando los ex del 46 el 2º Batallón de la nueva unidad.

Serán éstos quienes precisamente serán enviados a Egipto (tras una breve escala en Malta), para sofocar la revuelta de Arabi Pasha (v. post anterior), estando algo más de tres meses en la Tierra de los Faraones. Regresan a la Gran Bretaña entre octubre de 1882 y abril de 1883, pero son llamados de vuelta a Egipto para sofocar el levantamiento de los Mahdistas, pero poco después de llegar, King vuelve a meter la pata, ya que en esta ocasión es arrestado por estar borracho y dormirse en su puesto de guardia, por lo que va a estar en prisión unos cinco meses, entre octubre de 1883 y febrero de 1884. A finales de ese año, el general Wolseley organiza dos columnas para rescatar al general Gordon, sitiado en Jartum. Joseph King es enviado junto a su Batallón en la columna que remonta el Nilo bajo el mando directo de Wolseley. Tras el fracaso de la misión y el regreso a sus cuarteles, va a volver a ser arrestado por estar bebido en acto de servicio, por lo que se pasará 45 días encarcelado entre mayo y junio de 1885. El 4 de agosto de aquel año, regresa al Reino, pasando a ser reservista, hasta 18 de febrero de 1895, cuando es licenciado definitivamente.

Al final de su carrera militar, Joseph King había obtenido las medallas de la Campaña de Egipto y Sudán (con fecha de 1882), con el pasador de “The Nile 1884-85” y la del Khedive.

Reverso de la Egypt Medal de Joseph King.

Reverso de la Egypt Medal de Joseph King.

Un primer vistazo en la biografía de King nos muestra, sin lugar a dudas, que no fue un soldado precisamente ejemplar. Al parecer, desde el inicio de su carrera militar, tuvo serios problemas con el alcohol (una adicción a la que probablemente no se entregaba únicamente estando de servicio). Pero lejos de ser un caso aislado, King nos muestra ser uno de los miles de militares británicos que cayeron en el alcoholismo. La dura vida de la milicia y las pocas opciones de recreo alternativo, estaban entre sus causas. Así, los altos mandos del ejército británico, por un lado se preocuparon por orientar las actividades de recreos hacia hábitos menos perjudiciales para el propio ejército; mientras que por otro lado fomentaba la creación de Sociedades de Abstemios, que premiaban a los oficiales, suboficiales y tropa que se mantenían alejados del alcohol, con un curioso sistema de condecoraciones extraoficiales, normalmente de carácter regimental. Condecoraciones que podían ir desde haberse mantenido sobrio 6 meses, hasta 20 años, o por haber prestado servicios especiales a la asociación. La primera asociación de este tipo apareció en la India en el año 1862, y seis años más tarde se fundaba la primera de la Royal Navy. Ejemplos de estas medallas, se pueden ver en las siguientes webs:

http://www.stewartbooks.com/Temperance_Medal.htm

http://indiannumismatics.com/products.php?id=76

Además, hay que entender lo dura que era la vida del soldado, y que el alcohol podía ser para ellos la única válvula de escape. Los soldados británicos eran jóvenes que apenas habían sobrepasado los 20 años, que alternaban extenuantes campañas (que en el caso de la egipcia incluían marchas por el desierto a más de 45º y luchar contra temibles enemigos, cuando no hacer frente a multitud de enfermedades1), con periodos de gran ociosidad, en los que había muy poco que hacer, más que la instrucción básica. Sus oportunidades de ocio, además, se veían drásticamente reducidas por lo magro de su paga. A los soldados británicos se les conocía popularmente como los “soldier-shilling-a-day” (soldados de un chelín2 al día), una paga paupérrima a la que añadían diariamente (pesos aproximados): medio kilo de pan, medio kilo de carne,  28gr. de té, 70gr. de azúcar, 14gr. de sal y 250gr. de verduras3. El resto de su alimentación y mantenimiento debía de salir de su magra paga. Cabe decir que a diferencia del resto de ejércitos europeos, el británico no funcionaba por conscripción obligatoria, sino que los soldados que se alistaban lo hacían de una manera voluntaria, a principios del siglo XIX lo hacían por un periodo de 21 años; hacía 1880 se rebajó el periodo a 12 años, prorrogables. Así, hemos de tener en cuenta que los jóvenes que se unían al ejército era porque probablemente veían en él la única manera de no morir de inanición en las calles de Londres, Manchester o Glasgow. La inmensa mayoría eran jóvenes sin formación, que veían en el ejército una manera de ganarse la vida y aprender un oficio que les permitiera regresar a la vida civil con alguna posibilidad de ganarse la vida. Pero a base de privaciones y peligros durante muchos años.

Sargento del Regimiento de Cornualles con las condecoraciones de las campañas de Egipto y Sudán. ¿Sería este suboficial el responsable de arrestar al inefable King?

Sargento del Regimiento de Cornualles con las condecoraciones de las campañas de Egipto y Sudán. ¿Sería este suboficial el responsable de arrestar al inefable King?

En los libros y artículos de Historia Militar, parece que solo hay espacio para hablar de héroes, de sus grandes hazañas y de sacrificios que van más allá de lo razonable. Hombres, más o menos corrientes, que en un momento de sus vidas, alentados por sus ideales o empujados por las circunstancias, llevaron a cabo misiones que los llevaron en muchos casos a la muerte, pero en la mayoría de las ocasiones, también a la inmortalidad.

No está de más, que de vez en cuando, recordemos a los otros soldados. En los ejércitos no solo hay sitio para los héroes. La mayor parte de la milicia, está compuesta por una masa anónima, que nunca sale en los libros de Historia, pero que deja su trabajo, su familia, su mundo, para enfundarse un uniforme e irse a combatir lejos de su hogar. Un general británico comentaba que estos soldados eran como ladrillos, que solos no servían para nada, pero juntos hacían altas murallas. Anónimos ladrillos sobre los que se edifican los imperios.

NOTAS:

1 El cólera mató a más soldados británicos que los rusos, en la Guerra de Crimea, por ejemplo.

2 Un chelín es una veintena parte de una libra.

3 WILKINSON-LATHAM, R., 2005. p. 5. En el original, se habla de libras y unzas. La conversión la ha realizado el autor del post.

BIBLIOGRAFÍA:

  • GORDON, L.: British Battles and Medals. Ed. Naval and Military Press Ltd. 7º Edición. Londres, 2011. Versión revisada por John Hayward, Diana Birch y Richard Bishop.
  • WILKINSON-LATHAM, R.: The Sudan Campaign 1881-98. Osprey Publishing. Colección Men-At-Arms nº59. Londres, 2005.
  • http://www.northeastmedals.co.uk/british_regiment/duke_of_cornwalls_light_infantry.htm
  • http://www.soldiersofthequeen.com/page3eee-Sergeant1stDukeofCornwallsRifleVolunteerCorps.html
  • http://www.stewartbooks.com/Temperance_Medal.htm
  • http://indiannumismatics.com/products.php?id=76

Condecoraciones británicas: Medalla de Egipto y Sudán 1882-1889

03 Miércoles Abr 2013

Posted by Joan in Condecoraciones europeas

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Abu Klea, Egipto, General Charles Gordon, Gladstone, Jartum, Las Cuatro Plumas, Mahdi, Nilo, Sudan, Tamai, Tel-El-Kebir, The Four Feathers, Wolseley

Medallas de la campaña de Egipto y Sudán. Colección David Alfaras

Medallas de la campaña de Egipto y Sudán. Colección David Alfaras

“Lo que concierne a Egipto, concierne al Reino Unido”. Esta fue la política que dirigió la mirada de Londres hacia aquel rincón del mundo, desde que la India se convirtió en la joya de la corona del Imperio Británico1, importancia geoestratégica que se multiplicó a partir de 1869, cuando se construyó el canal de Suez. Impresionante obra de ingeniería que permitía a los británicos pasar a contar sus viajes a la India en términos de meses a semanas.

Por aquel entonces, Egipto seguía perteneciendo al Imperio Otomano, pero ya hacía décadas que la Puerta Sublime apenas si tenía en la región un poder nominal poco más que para nombrar al “Khedive”, su Virrey; ya que la política estaba tutorizada por Gran Bretaña y Francia, aliadas ante el peligro común que significaba Rusia.  

Aunque fueron los habitantes de aquellas tierras quienes pusieron en serios apuros a los británicos durante más de 10 años, dando como resultado míticas batallas, un par de interesantes condecoraciones y una retahíla de novelas y películas, destacando muy por encima de las demás “The Four Feathers” (“Las Cuatro Plumas”).

Los primeros problemas serios tuvieron lugar en 1882. Egipto se agitó por una crisis política, ya que un grupo de militares locales, encabezados por Ahmad Arabi Pasha Al-Misri, se alzaron contra el Khedive Tewfik Pasha, a quien consideraban demasiado condescendiente con las potencias europeas. Los británicos defendieron al Khedive, teniendo lugar serios combates entre las dos facciones, como el bombardeo de Alejandría o la célebre batalla de Tel-el-Kebir, que se saldó con una aplastante victoria británica, redondeada con la captura de Arabi Pasha, que fue deportado a Ceilán (Sri Lanka).

Para conmemorar esta campaña, se creó la medalla de Egipto de 1882, pero como fuera que las acciones militares se alargaron hasta 1889, la medalla se siguió otorgando para las misiones que, dos años más tarde, tendrían a Sudán como marco operativo.

Así, en 1884, Egipto volvía a estar en problemas. Esta vez a causa de Sudán, una de sus provincias. Y los británicos, los primeros interesados en la estabilidad de aquel país, hicieron suyos sus problemas. Todo había empezado en 1881, cuando en Sudan, aprovechando la revuelta de Arabi Pasha, un oscuro carpintero llamado Mohamed Ahmed se proclamó Mahdi, un cargo político-religioso de carácter fundamentalista, que pronto cosechó millares de seguidores en el país, y que se multiplicaron cuando en Mahdi, no solo le declaró la guerra a Egipto, sino que aniquiló a dos de sus ejércitos. Los británicos pasaron a la acción, doblegando a los sudaneses en varias batallas, destacando las de El Teb y Tamai. En ellas, los Derviches sudaneses, fuerza de élite de los Mahdistas, demostraron ser un enemigo muy temible. Así, en Tamai llegaron a romper el mítico “cuadro” de la infantería británica (Castlelton, uno de los personajes de “Las Cuatro Plumas” muere precisamente en esta batalla). 

 

Cuadro de Infantería de los Cameron Highlanders.

Cuadro de Infantería de los Cameron Highlanders.

Tal fue la fiereza de estos combates que el gobierno británico optó por dejar Sudán en manos del Mahdi, y envió al general Charles Gordon a supervisar la retirada de los egipcios y sudaneses aliados de la ciudad de Jartum. Pero al llegar a Jartum, Gordon, hombre místico y de carácter voluble, cambió de idea y decidió quedarse en la ciudad para resistir a las tropas del Mahdi, que tomó el guante y empezó el asedio el 12 de marzo de 1884. En Londres, la última cosa que quería el premier Gladstone era seguir combatiendo en aquel erial, pero la presión de la opinión pública, que le reclamaba liberar a Gordon y defender la honorabilidad del ejército británico, le obligó a mover ficha.

Y con un retraso que, a la postre, se demostraría fatal, Gladstone ordenó a Sir Garnet Wolseley rescatar a Gordon. En noviembre de 1884, se organizaron dos columnas. La primera, encabezada por el propio Wolseley remontó el Nilo; la segunda, a cargo del general Herbert Stewart, debería operar desde Suakin y atravesar el desierto por Metemmeh. Y fueron éstos quienes, a la altura de Abu Klea, se toparon con una fuerza de 10.000 sudaneses, frente a los 1.500 británicos (apoyados por un contingente de egipcios y sudaneses aliados). Por segunda vez, los Mahdistas consiguieron romper el cuadro británico, pero no pudieron llevarse la victoria, que una vez más cayó del lado de las casacas rojas (azules en esta ocasión).

Batalla de Abu Klea: https://www.youtube.com/watch?v=2MuNeFPvWag

Pero el avance por tierras sudanesas era lento y trabajoso, con continuas escaramuzas y emboscadas. De hecho, el propio general Stewart murió en una de ellas cerca de Metemmeh. Unos días más tarde, les llegó la noticia que Jartum había caído y Gordon asesinado, el 22 de enero. Unos días después, la expedición recibió la orden de retirarse hacía el Cairo. Si bien la guerra no se dio por concluida y se siguieron contando con combates, algunos de cierta magnitud como las batallas de Hashin y Tofrek, ambas descantadas hacia el bando británico.

Gordon de Jartum, de George W. Joy. En la Leeds Art Gallery.

Gordon de Jartum, de George W. Joy. En la Leeds Art Gallery.

Pero el movimiento del Mahdi sufrió un serio revés cuándo su líder falleció de tifus a mediados de 1885. A partir de entonces, solo algunos líderes militares como Osman Digna, trataron de incordiar a los británicos, pero sus acciones pocas veces fueron más que pequeños encuentros armados en puntos de la frontera.

En cualquier caso, los británicos decidieron dejar el Sudan en manos de los Mahdistas, que lo mantendrían durante trece años (algún día nos remitiremos a la caída del régimen fundamentalista durante la Segunda Campaña Sudanesa y la mítica batalla de Omdurman). Si la intención de Gladstone era mantener la estabilidad política en Egitpo, no le hacía falta ocupar militarmente Jartum, sino proteger la frontera entre ambas regiones. Y es que los británicos habían pagado un alto coste por su apoyo al Khedive (y lapresión de su propia opinión pública): durísimos combates que se decidieron en ocasiones en el cuerpo a cuerpo entre soldados; la muerte de tres brillantes generales (los ya mencionados Gordon, Stewart y William Earle en labatalla de Kirbekan en 1885); además de unos altos costes financieros. Estos fracasos provocaron la caída del gabinete Gladstone.

Eso sí, dejaría para la posteridad novelas y relatos de leyenda y unas bonitas medallas, a las que se le añadieron los siguientes pasadores:

–          Alexandria 11th July: para quienes participaron en el bombardeo de la ciudad durante la revuelta de Urabi Pasha. Todos ellos miembros de la marina.

–          Tel-El-Kebir: para quienes participaron en la batalla de dicho nombre el 13 de setiembre de 1882.

–          Suakin 1884: para aquellos que entre los días 19 de febrero y 26 de marzo de 1884, desembarcaron en la región de Suakin o Trinkitat.

–          El-Teb: para aquellos que el día 29 de febrero de 1884 participaron en dicha batalla. Se acuñaron 4.200 pasadores con este nombre.

–          Tamaai: para aquellos que el día 13 de marzo de 1884 participaron en dicha batalla.

–          El-Teb-Tamaai: para aquellos que participaron en ambas batallas.

–          The Nile 1884-85: para aquellos que participaron en la expedición para rescatar al general Gordon de Jartum.

–          Abu Klea: para aquellos que participaron en la citada batalla el 17 de enero de 1885. Se acuñaron 1.581 ejemplares y siempre debe ir acompañado del pasador “The Nile 1884-85”.

–          Kirbekan: para aquellos que participaron en la citada batalla el 10 de febrero de 1885. Se acuñaron 1.200 ejemplares y siempre debe ir acompañado del pasador “The Nile 1884.85”.

–          Suakin 1885: para aquellos que participaron en acciones en Suakin entre el 1 de marzo y el 14 de mayo de 1885.

–          Tofrek: para aquellos que tomaron parte en la batalla del mismo nombre el 22 de marzo de 1885. Siempre debe ir acompañado del pasador “Suakin 1885” y es muy raro de encontrar entre fuerzas británicas.

–          Gemaizah 1888: para aquellos que participaron en aquella batalla el 20 de diciembre de 1888.

–          Toski 1889: para aquellos que participaron en aquella batalla el 3 de agosto de 1889.

Así mismo, el Sultán de Turquía aceptó la propuesta del Khedive Tewfik de otorgar una medalla conocida como la Estrella del Khedive 1882-1891, de la que hablaremos en próximos posts.

 

 NOTA:

1 De ahí que los británicos abortaran con tanta rapidez la expedición de Napoleón en la tierra de los Faraones.

BIBLIOGRAFÍA:

GORDON, L.: British Battles and Medals. Ed. Naval and Military Press Ltd. 7º Edición. Londres, 2011. Versión revisada por John Hayward, Diana Birch y Richard Bishop.

WILKINSON-LATHAM, R.: The Sudan Campaign 1881-98. Osprey Publishing. Colección Men-At-Arms nº59. Londres, 2005.

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